Hace quince días masticábamos bronca tras el empate increíble que nos sacó Temperley en tiempo de descuento con la complicidad del arbitro. Hace siete días, con un equipo diezmado por las lesiones, le ganamos un partido muy duro a Flandria. Este mediodía Cole visitó a Tristan Suarez. Un equipo con un presupuesto envidiable y mucha influencia en AFA. Desde el año 97 que el tricolor no vencía en la cancha del lechero. Encima, la catarata de lesionados entre volantes y delanteros obligaba a Ferraresi a inventar un esquema táctico sin delanteros ni enganches clásicos. Y como si el destino se burlara de Cole a los cinco minutos Gastón Diaz sufrió un tirón que lo obligó a abandonar el partido. Para peor, a los 33 minutos del primer tiempo, cuando Cole empezaba a dominar el partido y a crear peligro en el área rival, Aquino convertía el primer gol para el local. Como se dice vulgarmente, estábamos en el horno...
Pero estos jugadores tienen un corazón a prueba de cualquier contratiempo. Y Cole se fue armando, ganando el medio con un despliegue conmovedor de Buzzi, Argentino (la figura), Young y Toloza (que corrió a todos). En los últimos diez minutos, el tricolor contó con dos chances claras para igualar. Um disparo de Marcarié que el arquero descolgó del ángulo milagrosamente; y una pelota que le quedó a Balanda en soledad dentro del área que se fue desviada por el palo izquierdo. La primera parte finalizó con la sensación de que el tricolor no se iba a entregar tan facilmente.
Los primeros veinte minutos del complemento mostraron a un Cole avasallador que metió en un arco al local. Así, a los 4 minutos Agentino clavó la pelota en un ángulo y puso la igualdad. El tricolor siguió atacando y tres minutos después Del Castillo ganó en el área de cabeza un centro pasado y anotó el 2 a 1 que ya era merecido. A partir de este momento, el plantel de Cole demostró porque está para grandes cosas. El equipo se plantó en la cancha a cara de perro y no permitió al lechero ni siquiera ilusionarse con la igualdad. Porque Marcarié y Fergonzi taponaban la salida del local y de contrataque amenazaban constantemente con estirar el marcador. El ex Ituzaingo estuvo muy cerca tras un jugadón personal en el que se gambeteó a tres jugadores y se la pellizcaron cuando estaba por definir.
Un párrafo especial para el arquero tan cuestionado. El Negro Luqui demostró que tiene chapa para ocupar el arco de Cole. Transmitió seguridad, tapó dos pelotas complicadas y salió muy bien en los centros cuando Tristán apretaba. Un rendimiento para que los hinchas de Cole nos quedemos tranquilos con el uno.
El final fue a toda orquesta. Cuando se cumplía el cuarto minuto del adicional ingresó Alejandro Orsi. El arquero le había cometido una falta a Fergonzi cerca del corner derecho y el mago sacó todos sus trucos. La pisó a lo Riquelme dentro del área dejando humillados a tres defensores locales y se la tocó a Argentino para que convierta el tercero y sellara el resultado.
Esta tarde Cole sacó chapa de gran equipo. La remera nueva debutó de visitante y lució hermosa en la tarde de Ezeiza. A once fechas de iniciado el torneo demostramos que tenemos hinchada y equipo de sobra como para ilusionarnos con algo más. Mientras tanto, disfrutemos de este presente y estos jugadores que "están dejando la vida por estos colores...".
Rodrigo González
