Colegiales ganó 1-0, sumó de a tres en su lucha por quedarse en la B y subió unos escalones en la tabla.
MARIANO PUPPO
La estadística indicaba que el visitante debía hacer el gasto. Por experiencia en la categoría y por la posición en la tabla. Pero el Tricolor, que en esta temporada está invicto de local, sabía que no podía desaprovechar la oportunidad que se le presentaba. No sólo sumaría para engrosar su promedio, sino que también pasaría a Español en la general y, porqué no, soñar con pelear arriba. De arranque nomás, Colegiales atacó pero sin mucha lucidez. Tuvo las mejores chances, las únicas en realidad, y debió haber convertido. Pero el partido era aburrido y así continuaría en el ST. Hasta que Víctor Molina se equivocó y se la dejó servida a Hernández, quien la mandó a guardar y le puso un manto de justicia al encuentro. Sobre el final, se produjo el único momento emotivo del partido, porque Español fue a puro centro, dejando la contra servida para Cole, que no lo pudo cerrar. Un Cole que sueña y juega a dos puntas.
