El final del partido con Dock Sud les dejó una sensación clara a todos los hinchas de Cole que fueron a Malaver y Posadas. Este equipo -más allá del rendimiento futbolístico- esta dispuesto a jugar cada partido como si fuera una final. Esta es la actitud que escaceaba en los últimos torneos, cuando el equipo se derrumbaba inexplicablemente en los momentos más inoportunos.
El partido de ayer tuvo varios condimentos que hicieron mucho más dificil la obtención del triunfo para el puntero. El rival venía golpeado con dos derrotas y con la tabla del descenso que lo muestra en la última posiciónos, con la necesidad imperiosa de sumar algo en Munro. El calor agobiante y las impresiciones de los jugadores que desequilibran en Cole hacían dificil abrir el marcador y el Docke se mostraba peligroso en las contras. Y por último el árbitro Cernadas, que hizo todo lo posible para emparejar el partido.
Sin embargo, este Cole Puntero Versión 2008 se sobrepuso a todo estos factores y con el corazón abierto y mucha inteligencia se quedó con los tres puntos y estiró a cinco la diferencia con sus escoltas, Barracas Central y El Porvenir.
Porque en el primer tiempo, con un Dock Sud que esperaba corriendo a todo jugador que tuviera la casaca tricolor, haciendo muy complicado a Cole generar situaciones claras; el local no se desesperó y mantuvo la calma hasta que llegará su momento. Así fue, como en los últimos minutos de la primera parte, Cole empezó a apretar el acelerador (aprovechando el gran desgaste que había hecho la visita) y consiguió el corner que el Ruso Ingemthrom picando al primer palo convirtió en el 1 a 0.
Ahí empezó otro partido, la visita tenía que salir y Cole lo podía dañar mucho con espacios. Pero empezó el Show de Cernadas y Baigorria se fue a las duchas por una entrada fuerte en mitad de cancha, que se podía haber resuelto con una amarilla.
El complemento mostró a Cole con diez hombres en un esfuerzo conmovedor por definir el partido. Con garra y fútbol acorraló al Docke y contó con varias chances para terminar la historia. Mientras la visita en superioridad numérica se encontraba desbordada y confundida.
El mayor problema de Cole era el árbitro Cernadas que se empeñaba con cada fallo en complicar el triunfo del tricolor, irritando a la gran cantidad de gente fue hasta el Bajo Munro. Así llegó la expulsión de Tagliabue por protestar y los cinco minutos de adicional para darle alguna esperanza al Docke, que no podía inquietar a la defensa tricolor. La lesión en el final del Beto Meinecke, sumado a las dos expulsiones, complican el panorama de cara al partido del próximo miércoles en la Basílica contra Luján, que venció a Barracas y está tercero.
Pero nada debe quitarle la alegría del final al pueblo Tricolor, que con la vuelta de los bombos y las trompetas no paró de alentar en toda la tarde, desatando un verdadero carnaval en la tribuna de Malaver. Porque este equipo seguramente perderá algunos puntos en el futuro, pero si mantiene esta actitud, estamos convencidos que el campeonato del Bajo Munro no se va.
Rodrigo González
