"La camiseta de Cole se tiene que transpirar si no, no se la pongan, váyanse ...". Así despidió la parcialidad Tricolor a su equipo que no supo estar a la altura de las circunstancias, como en todo el torneo, y quedó afuera de la lucha por un lugar en la Promoción. Era el momento de la verdad, en sólo noventa minutos se decidía el destino de dos equipos: Colegiales y Argentino de Rosario. Al principio el partido fue parejo, muy luchado en la mitad de la cancha, aunque Cole era un poco mas, pero no lastimaba. La primer llegada fue para el equipo del Huevo Rondina, a los dos minutos tuvo un mano a mano que Torres desperdició. Luego de los quince minutos, llegó uno de los mejores momentos del Tricolor en el partido, pero todo se desvaneció a los 23 minutos cuando a partir de un tiro libre, aparece en el área Muller, ganándole a todas las cabezas de Cole, y marca el 1 a 0 para el Salaito que comenzaba a soñar con la semifinal del reducido. Después de este duro golpe, Colegiales arremetía pero no lograba conseguir el empate. En los últimos quince minutos, el tricolor no encontró el rumbo para invertir el resultado. Y así se fueron a los vestuarios, con un resultado que dejaba muda a la parcialidad local.El segundo tiempo no fue muy diferente,el equipo de Rondina no sabía aprovechar las numerosas posibilidades de pelota parada. Para colmo, para complicar aún más las cosas, a los 18 minutos, Chacón en posición dudosa decretó el dos a cero que despertó la ira de los plateistas que insultaban a los árbitros, jugadoresy cuerpo técnico. De ahí en más, el partido se desdibujó, como Colegiales pudo descontar,también los rosarinos podián estirar la diferencia. El pitazo final sonó como una sentencia de muerte para los dirigidos por Rondina,que dejaron pasar su última posibilidad de la temporada para ascender.El Club Atlético Colegiales jugará otro año en la Primera C del fútbol Argentino. En la temporada 2006/07 Cole mostró una imagen desteñida,donde se cometieron errores, tanto en el campo de juego como en lo dirigencial. Sólo nos resta mencionar que de los errores se aprende, y esperemos que al menos esto haya servido para que en la próxima campaña no se cometan las mismas fallas, y así de una vez por todas podamos ver al club de nuestros amores en la Primera B Metropolitana, categoría de la que nunca debió haberse ido.
