miércoles, 21 de marzo de 2007

Peor es nada


Un empate con sabor agridulce. Agrio porque Colegiales desaprovechó una chance de sumar de a tres y acortar distancia con el puntero Barracas Bolivar. Dulce porque después de dos derrotas consecutivas, además del punto se rescata la actitud y el orden del equipo. Sin embargo, la preocupación mayor (hasta admitida por Rondina) es la falta de generación de situaciones de gol incluso con un jugador más en cancha.
Durante el primer tiempo, Luján condujo la dinámica del cotejo por la solidez de sus mediocampistas y la explosión de Abel Oroná, pese a las poco efectistas insinuaciones de Torres y Mendoza en alguna que otra arremetida. En los últimos quince minutos, el equipo que conduce Sergio Rondina logró asentarse con firmeza y dominó, aunque las posibilidades de concretar eran escasas y casi nulas.
La segunda etapa empezó con un tempranero gol de Torres, después de aprovechar el descuido defensivo del local. Pero cuando Zeballos Y Smargiassi comenzaban a controlar y distribuir el balón en el centro, el arbitro Diego Colombo sancionó un penal (cuarto en 3 partidos) no del todo claro que Fernando Rocha convirtió en gol. Desde allí el partido fue otro: sin un dominador, el partido pudo ser para cualquiera hasta la expulsión de Federico Gásperi. Con la salida del marcador de punta izquierda, Fournier tuvo más espacio y Colegiales tuvo dos situaciones muy claras: una se Sebastián Tagliabue y otra de José Pereyra que por poco no terminaron en gol.
Lucas Frioli

Presentacion de la camiseta

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